Los multiplicadores.


No, no hablo de una nueva serie de dibujos animados sobre personajes con poderes extraordinarios...Aunque bueno, bien mirado, también podría ser así, ya que de lo que vamos a tratar hoy es de esas prendas mágicas que por arte de birlibirloque convierten nuestro armario en un espacio repleto de posibilidades combinatorias. ¿Acaso no merece eso ser considerado un poder extraordinario?

Veamos: En parte, fruto de mi propia experiencia, y en parte, de la observación, he ido recopilando mentalmente una serie de elementos que creo que me serían muy útiles para dar sentido y coherencia a mi caótico montón de prendas de vestir.

¿En qué me baso?

En las miles de veces que, ante la perspectiva de una ocasión especial que requiere un esfuerzo extra en el vestuario, me he dicho a mí misma: ¡Ay, si tuviera tal prenda para poder combinarla con esta otra...! ¡Ay, si tuviera tal otra! (a menudo son las mismas).

Y casi siempre esta situación se ha dado cuando ya no tenía tiempo de reaccionar, porque yo, como buena española, soy de las que lo deja todo para última hora. Así que me he tenido que apañar con lo que tenía, que además suele ser algo que ya he usado (y combinado igual) hasta la saciedad.

Así que como no quiero que me vuelva a pillar el toro (típica expresión española, ya que estamos) he decidido pasar esa lista mental a papel para tenerla bien presente en el futuro. Sobre todo cuando me encuentre en una tienda de ropa, frente a un atrayente expositor de prendas ordenaditas y con música de fondo incitante al desenfreno consumista. En esos momentos en que no puedo pensar y me parece que ese pantalón de pata de gallo y con lentejuelas que tengo ante mí, es justo lo que siempre he deseado encontrar y mi vida no volverá a tener sentido sin él...(¡¡¿?¿?¿?!!).

En esos momentos, es cuando necesito tener bien presente la lista de elementos multiplicadores de mi armario.

Esta lista no es la enumeración de un fondo de armario ideal. Es algo distinto. Está compuesta por prendas y complementos que permiten rentabilizar al máximo lo que ya tenemos. Permiten, o bien aportar pequeños toques, como ya vimos el otro día, o combinar prendas que pasan temporada tras temporada en el armario porque nunca encontramos nada que pegue con ellas. Permiten incluso dar un lavado de cara a otras que tenemos más amortizadas.

Y sin más dilación, vamos a analizar cada uno de los elementos de esta lista (la mayoría los he nombrado ya en múltiples ocasiones):

* Una rebeca larga negra, sobre la que no me voy a extender porque ya lo hice suficientemente en la entrada correspondiente al cárdigan negro, y cuyas combinaciones sirven también como ejemplo aquí.

* Como ya vimos igualmente en una entrada anterior, todos aquellos elementos que nos permiten aportar un pequeño toque a nuestro vestuario habitual, como son:

* Un broche de flor, con el que podemos dar un aire renovado y festivo a una chaqueta, a un vestido de cuello en pico, a un chaleco y a una camiseta de tirantes anchos combinada con una falda. Podemos incluso prenderlo en unos tirantes.

* Leotardos, medias tupidas, medias caladas y calcetas largas: Este elemento pertenece más bien al crudo invierno, pero nos conviene tenerlo presente a todas horas. Unos leotardos de un color nuevo pueden transformar totalmente esa falda que tanto te pones, y unas calcetas largas cambian por completo el aire de un vestido. Así que cuando creas que necesitas comprarte algo a toda costa, recuerda que unas nuevas medias siempre te vendrán bien y te sacarán de un apuro.

* Corbatas: como ya vimos, te pueden servir como cinturón y aportan un aire muy original.

* Cintas de raso: recuerda que pueden funcionar como corbata, como cinturón o simplemente como un lazo cerrando el cuello de una camisa.

* Un collar de perlas en color marfil combinadas con cadenas plateadas: de todas las variantes posibles de este collar, me quedo con ésta. ¡He comprobado que renuevan por completo cualquier look! Dan un toque festivo, vintage y chic a todo lo que tocan. Muy recomendables.




* Zapatos salón en color "nude", o para entendernos, en color beis rosado (como el tono de la piel): Son tremendamente socorridos para combinar todos tus vestidos...Mejor dicho, ¡toda tu ropa!. Hacen las piernas más largas, pegan absolutamente con todos los colores, favorecen y además, restan seriedad y tristeza a un vestido negro. Si alguna vez te has lamentado de que no encuentras complementos para ese vestido de color impactante, es porque te faltan estos zapatos.

* Cinturón joya: Acaba con la sosez de cualquier combinación ultra básica. Haz la prueba. Ponte unos vaqueros, una camiseta blanca y plántate un cinturón bien vistoso y brillante. ¡No te creerás lo bien que queda un conjunto tan simple! Y si te pones los salones en color piel y una cartera negra de vestir, no te quitarán ojo.

* Falda de tul: Esto es para atrevidas (algo que yo aspiro a ser). Bajo una falda de vuelo, dará un volumen increíble e impactante. Llevada sola, es una prenda indiscutiblemente chic, original y coqueta. Con un top sencillito y sin mangas (no de tirantes) y el collar de perlas en tono marfil, estarás impecable y muy juvenil, que siempre es de agradecer (cada vez más). Eso sí, mejor que la falda no sea muy corta.

* Chaleco de punto muy fino, largo y abierto: Últimamente me he dado cuenta de las posibilidades de una prenda tan simple. Al ser tan ligero, no abriga en exceso, y puedes combinarlo con todas tus camisetas. Al ser largo, queda muy bien con vestidos cortos, y hace que parezcan distintos. Al ser abierto, permite combinarlo con cinturones de todo tipo si es que prefieres llevarlo cerrado. Si no, el hecho de ir abierto es una de sus ventajas, porque aporta una nota de color diferente sin anular la prenda que llevas debajo. Y por último, queda bien con pantalón largo, con bermudas, con faldas cortas (con largas, no) y con vestidos cortos. Incluso si lo combinas con camiseta y shorts irás más abrigadita y bastante más formal.

* Cinturón tipo corsé o fajín (ancho): Es increíble lo que un cinturón de este tipo puede hacer por el más soso de los vestidos. Este complemento lo he mencionado tantísimas veces y en tantos ejemplos, que no quiero ser pesada. Sólo hazte con uno y pruébalo con todo lo que tengas. Te llevarás sorpresas muy agradables.

* Sandalias de tacón fino y alto en color bronce metalizado: Esto lo recomiendo ni más ni menos que porque yo tengo unas, y desde luego, creo que fueron una de mis mejores compras. Pegan con todos (o casi todos) los vestidos que tengo. Son de tiritas mínimas y tacón finísimo, y ese toque metalizado en bronce queda súper elegante (no soy objetiva, lo confieso). Si estás pensando en comprarte un sólo par de zapatos que te saquen de todos los apuros "boderiles" y demás, las recomiendo sinceramente.

* Bolsito pequeño de brillos multicolor (de fiesta): También tengo uno, y sé que consigue hacer que todo lo que me pongo pegue entre sí. Si puedes, hazte con uno que combine brillos plateados, dorados y de colores. Por arte de magia, resaltará el que coincida con el vestido que llevas puesto.




* Botas de caña alta color marrón chocolate: Un básico entre los básicos. Me encanta este color para los complementos. Es elegante, pega con muchísimas cosas y tiene siempre un aire a "bueno" que no tienen otros colores. Queda muy bien tanto con colores pastel como con colores oscuros.

* Bufanda o fular a rayas de colores: Con esto pasa como con el bolsito multicolor. Aporta luz y alegría a cualquier cosa, y permite combinar prendas de colores que a priori sean difíciles de conjuntar.

* Camiseta estampada: Se han convertido en un básico de los armarios actuales. Llevadas un poco sueltas, son perfectas para combinar con cualquier tipo de chaqueta; tanto negra de terciopelo, como de tweed tipo Chanel, como el clásido blazer de vestir de toda la vida. Además, también quedan muy bien con rebecas de todo tipo, y si encima añades el collar de perlas, tendrás un resultado chic a más no poder. No te cortes a la hora de combinarla con cualquier tipo de falda o pantalón.




* Un top blanco o marfil sin mangas y cuello redondo un poquito bajo, y otro igual en negro: De todos modos, si tengo que elegir, me quedo con el blanco o marfil. Si además tiene algún tipo de drapeado o plisado en la parte delantera, mejor. Es increíble lo amortizable que es esta prenda. Es la típica que te saca de apuros de última hora. Queda perfecta con cualquier look formal, de fiesta, en ceremonias...Combina con cualquier falda, pantalón o chaqueta, y con collares de todo tipo. Y para colmo, pega con cualquier color. Cuanto más impactante y vivo, mejor.

Y con este comodín, doy por terminada la entrada de hoy, que como siempre, se me ha alargado más de lo deseado.

Y ahora contadme: ¿Se os ocurre alguna nueva prenda multiplicadora? (Recordad que no hablamos de fondo de armario).


(La camiseta estampada es de Mango, y los dos bolsitos, de Luna Llena).

Comentarios

María ha dicho que…
Salvo una o dos excepciones, tengo toda la lista y sí, la uso precisamente en ese sentido, para variar looks frecuentes. Es verdad que es asombroso el cambio que a veces operan los pequeños detalles, o no tan pequeños, pero sí es importante la manera de combinarlo. Hay chicas que aciertan a la primera y lo hacen casi de forma inconsciente. A mi me cuesta un esfuerzo y no siempre me sale bien, pero hay que probar, y probar, y probar...Y vale la pena, siempre te llevas alguna sorpresa o haces algún hallazgo chic de los que sorprenden a propios o extraños.

Como siempre, tu recopilación es tan completa que ahora mismo no se me ocurre nada más, pero si eso...lo pongo :)

Un beso
Elena ha dicho que…
me ha encantado tu post, lleno de ideas!

unos buenos zapatos son multiplicadores, porque consiguen hacer de cualquier look normal algo excepcional!
Tasha ha dicho que…
Qué razón tienes, María. Hay que probar y probar, y a veces hay descubrimientos muy interesantes. Cosas que no te esperabas que funcionaran, lo hacen, y muy bien!

El caldo de cultivo ideal es no tener muchas cosas y calentarse la cabeza para salir de un aprieto sin comprar nada nuevo. Entonces es cuando se hacen los buenos descubrimientos :)

Yo este fin de semana tengo una boda y me voy a atrever con uno de esos descubrimientos, jeje. Ya te contaré.

Hola, Elena, bienvenida! desde luego, los zapatos son los mejores multiplicadores. No he querido ponerlos todos porque necesitaría blog y medio, así que he intentado centrarme en los más versátiles.

Gracias por tu visita y tu comentario! :)
María ha dicho que…
"El caldo de cultivo ideal es no tener muchas cosas y calentarse la cabeza para salir de un aprieto sin comprar nada nuevo. Entonces es cuando se hacen los buenos descubrimientos :)"

SIIIIIIIIIIII, completamente de acuerdo!

Cuéntanos cómo va ese próximo intento, seguro que nos sorprendes.

Por cierto, aprovecho para hacer una sugerencia:

No te atreverías a poner alguna vez una foto con una composición de prendas reales (tuyas) que ilustren algún look o idea de las que nos cuentas? Algo parecido a lo que yo hago, ni que sea de vez en cuando por aquello de "una imagen vale más que mil palabras"?
Tasha ha dicho que…
Sí, ya lo he pensado. Estoy un poco cansada de tanto secretismo...! Un día de éstos a lo mejor hasta firmo con mi nombre ;P

Si me sale bien el experimento para la boda, lo pongo en un post. Pero a toro pasado, que tengo que ver si me convence. Además, no me gustaría que alguien me reconociera en la susodicha boda por lo que llevo puesto...y peor...se sintiera decepcionada! :D

Mmmm...bien mirado, creo que me aguantaré más con el secretismo. ;)
Blaudemar ha dicho que…
Mis prendas "fetiche", aparte de las socorridísimas chaquetas negras,son los complementos. Soy la "reina" de los fulares, y también doña collares.
Cuando quiero comprarme algo y no encuentro "nada", tiendo a buscar algún collar o otro pañuelo. Y lo de las medias no había reparado en ello, pero también lo hago.
Tienes muchísima razón con lo del chaleco largo y fino. Consigue que cualquier look parezca "nuevo". Le tengo echado el ojo a uno, gris.

Besos!
Yaiza ha dicho que…
Yo también hecho en falta alguna foto, y si quieres, ya sabes, existe la tipica pose de agachar la cabeza y dejarse cubrir la cara con el pelo... lo hacen en miles de blogs... (bueno, no leo tantos, no creais)...

Como bien dice María, tu lista es completisima y tambiénla tengo casi toda. Aunque no se si añadir unos vaqueros de buen corte como prenda multiplicadora, son tan socorridos... por supuesto que no valen para una boda pero bien combinados valen para más de una ocasión, un poco más formal, informal total...

Besos

Yaiza
Mara ha dicho que…
Buena entradita si señor.
Estoy de acuerdo con lo de los vaqueros que junto a unos bonitos tacones te dan un aire arreglá pero informal que para esas mañanas que tenemos como con poca inspiración bienen requetebien.
Yo ultimamente he descubierto lo bien que quedan unos simples pendientes de perlas y eso que no hace tanto los veía como de señora uf me estaré haciendo mayor?, pero la verdad es que le dan mucha luz a la cara o eso me parece a mi.
También me gusta tener fulares, collares y anillos de colores para combinar con el top o incluso con el color de las uñas, son pequeños detalles pero que dan muy buen resultado, bueno y no se me ocurre que más añadir porque chiquilla ya lo has puesto todo, como te lo curras. Besines
Bella ha dicho que…
Otra entrada para imprimir y pegar en la puerta del armario! Como Maria y Yaiza, yo tambien lo tengo casi tdo pero voy rauda a comprar lo que me falta... de todo lo que has dicho yo, lo que mas he amortizado ha sido el chaleco fino, largo. Lo tengo en negro y no me canso de ponermelo desde hace 3 anyos. Solo le anyadiria a tu entrada otra cosa: probar distintas formas de peinarte segun lo que te pongas... es otra forma de multiplicar sin gastar dinero. Y sirve lo mismo para melenas como para pelos cortos. Os sorprendera ver como cambia el aire de un look, segun vas peinada!
Sole ha dicho que…
Tasha ¡Que ideas más buenas!
De todos "Los multiplicadores" me quedo con las botas de caña alta de color marrón chocolate (en mi caso, planas), la bufanda o fular a rayas de colores (como ya he dicho en otra ocasión, soy una loca de estas prendas) además, en invierno que solemos llevar tonos tan oscuros, logran darle otro aire, lo alegran ¿No creeis?
Y me quedo también con las medias tupidas y la rebeca larga negra.

Se me ocurren un par de "multiplicadores", no se que os parecerán.
Para mí multiplicador sería un vestidito negro, el típico vestido de "cocktail", por la rodilla y el otro sería un vaquero.
Para mí estas dos prendas, depende del calzado que lleves, el peinado, los complementos...puedes sacarles muchísimo partido en diferentes ocasiones.

Yo sigo buscando las botitas marrones para este invierno. Si alguna sabe de algún sitio donde pueda encontrar...

Un besito para todas.
Tasha ha dicho que…
Blaudemar, precisamente el chaleco que yo tengo es gris. Y la verdad es que lo compré sin pensarlo mucho, lo dejé por ahí aparcado sin hacerle demasiado caso, y recientemente lo he redescubierto. Por eso lo he puesto en la lista, porque estoy asombrada de las posibilidades que tiene!

Yaiza, lo de salir yo en las fotos no lo tengo muy claro. No creo que lo haga, la verdad. Ni con los pelos en la cara, jajaja. Pero sí que voy a introducir algunos cambios por aquí y a poner muchas más imágenes, que si no, a la gente no le llega bien la idea.

Sobre el tema de la entrada, qué razón tienes, los vaqueros son el multiplicador número uno! para mí son tan básicos, que los he olvidado :) Pero desde luego, yo no sabría qué hacer sin ellos.

Mara, a mí me pasaba lo mismo con las perlas. Las veía taaaan clásicas que me parecían ñoñas y de señora mayor. Pero de pronto me encantan los collares de perlas! eso sí, combinados con ropa súper informal. Nada del típico jerseicito de cuello alto y la falda tubo...nooooo! Con camisetas y vaqueros, o con vestidos más juveniles. Aunque sigo sin verme con ellas para todos los días.

Bella, otro acierto para añadir a la lista! el peinado! eso lo tenía en mente y lo olvidé, gracias ;). Pero es verdad, cambia todo una barbaridad y sin gastarte un euro. Lo malo es que hay que ser habilidosa, y yo soy un poco desastre con el pelo. Me encantaría hacerme mil cosas, pero me haga lo que me haga, se me resbala!

Sole, los fulares y pañuelos son otra de las cosas a las que yo no les hacía mucho caso y que ahora creo súper importantes. Dan mucha alegría...y calorcito...con lo friolera que soy yo :)

Los vaqueros son la prenda más versátil del mundo, desde luego. Y el vestidito negro, aunque yo he opinado en alguna ocasión que no me parecía imprescindible, empiezo a verlo con otros ojos. Sí que es verdad que lo veo muy versátil y favorecedor, pero en mi casa, nunca le he conseguido sacar todo el partido que se merece.

Sabes dónde hay un montón de botas marrones preciosas?? en Yoox (www.yoox.com) Yo me he comprado unas hace poco que me encantan! y no son los primeros zapatos que me compro ahí (ni bolsos). Estoy enamorada de esa página!